Recuperarse tras el parto.

¡Por fin! El verano me ha traído este año el mejor de los regalos, Julia.

Qué mejor que aprovechar este momento para comenzar mi blog hablando de la alimentación tras el parto. Ser madre es una experiencia increíble. Sin embargo, como es natural,  una vez pasados la euforia y el caos inicial, cuándo por fin la maternidad deja un segundo para ocuparse de una, te haces realmente consciente de que tu figura ya no es la misma y que algunos de los kilos que ganaste durante el embarazo siguen ahí.  No sentirse cómoda con la nueva figura es normal pero la solución no es inmediata y recuperarse es un proceso lento que suele durar entre 6 y 12 meses, así que no queda otra, la primera receta: PACIENCIA.

La combinación de una dieta saludable con ejercicio nos  ayudará a perder peso gradualmente durante los meses posteriores al parto.

Pero no todo es comer, por eso, mis consejos para reponerse lo mejor posible después  de dar a luz van en 4 direcciones:

1.EL ESTADO DE ÁNIMO ES FUNDAMENTAL

Mi primera recomendación es que evites compararte con otras mujeres, tú eres única y tu cuerpo tiene su propio ritmo de recuperación y funcionamiento.

Si después de unos días tras tener a tu bebe te sientes decaída y te pones a llorar sin motivo aparente no te preocupes, esto se debe a la disminución de los niveles de ciertas hormonas en sangre y lo más normal es que sea una sensación pasajera.

Eso sí, ten en cuenta que el estado de ánimo a menudo influye sobre los ‘impulsos’ de comer ciertos alimentos y por ello,  puede influir negativamente en la recuperación de  tu figura. No te refugies en la comida, trata de distraerte.

Los mimos y el apoyo de la pareja, la familia, los amigos  y el personal sanitario son fundamentales en esta fase.  Recurre a ellos y no tengas miedo a pedir ayuda.

2.LA LACTANCIA MATERNA: EL MEJOR ALIADO

Optar por la lactancia materna es una forma maravillosa de ayudar a tu cuerpo a que se reajuste. El tejido adiposo acumulado es una fuente de energía y de alimento para el bebé. Tanto esta grasa, como el exceso de Kilocalorías de la dieta, se destinarán a estimular la producción de leche materna. Por ello, dar el pecho a tu hij@ contribuirá a que recuperes la figura.

Si optas por no amamantar, no te preocupes, el peso se irá perdiendo también pero seguramente de una manera más gradual.

3. ALIMENTARSE BIEN ES IMPORTANTE

Sobre todo si se opta por la lactancia materna, parece lógico pensar que no es el momento para hacer una dieta demasiado estricta, ni hipocalórica. Lo más importante es comer de manera equilibrada.

Los nutrientes, como el calcio, el hierro y el ácido fólico son esenciales para las mujeres antes, durante y después del embarazo. Tomar suplementos de vitaminas y minerales puede ayudarte a garantizar el consumo de los nutrientes necesarios. Pero éstos deben tomarse con la supervisión de un profesional y por supuesto, no serán sustitutivos de una alimentación equilibrada. Existen algunos diseñados específicamente para mujeres lactantes.


10 CONSEJOS PARA RECUPERAR LA FIGURA DE MANERA SALUDABLE:
  1. 5 comidas al día: Procura no saltarte ninguna e intenta tener unos horarios regulares. Empieza el día con energía, el desayuno es importante. Intenta que contenga: un lácteo, una ración de cereales (pan, galletas, cereales de desayuno…) y una fruta o zumo. Come sin prisas.
  2. Consume alimentos de todos los grupos (legumbres, verduras, frutas, carne, pescado, huevos, lácteos, cereales…).
  3. Toma muchas frutas y verduras.
  4. Intenta comer más pescado que carne (los pescados, sobre todo los azules, contienen ácidos grasos esenciales importantísimos para el desarrollo del bebé) y elige las piezas más magras de la carne.
  5. No descuides el consumo de fibra, tiene un elevado poder saciante y facilita la digestión. Además, está indicada en casos de estreñimiento.
  6. Bebe mucha agua (8-10 vasos diarios).
  7. Reduce el consumo de sal, los alimentos ya contienen sodio de manera natural, cuanta menos adiciones mejor. El exceso de sal contribuye a la retención de líquidos, es probable que parte de tu sobrepeso tras el parto sea líquido.
  8. Evita los precocinados (suelen contener una cantidad elevada de grasas saturadas). Limita el consumo de azúcares simples contenidos en golosinas, caramelos, pasteles, bollería, chocolates...
  9. Recurre a técnicas culinarias poco grasas (horno, plancha, vapor, cocción, hervido…).
  10. Introduce en tu menú alimentos ricos en hierro (pescado, marisco, carne, huevos, legumbres…) y en ácido fólico (almendras, aguacate, remolacha…).


4. NO DEBEMOS OLVIDAR EL EJERCICIO FÍSICO

El ejercicio físico es fundamental en cualquier etapa de la vida. Sin embargo, antes de realizar cualquier actividad física, consulta al ginecólogo para estar segura de que no hay ningún riesgo. Hacer ejercicio te proporcionará, entre otros beneficios, relajación, fortalecimiento y tonificación los músculos. Además te ayudará  mejorar la posición corporal y el estado anímico. Es importante esperar a que termine el puerperio (40 días), cuando el parto es vaginal, o cerca de tres meses, en caso de cesárea.

La musculatura que forma tu estructura pélvica (periné o perineo), ha sido sometida a grandes esfuerzos durante el embarazo y el parto. Por ello, comienza haciendo los ejercicios de suelo pélvico que te recomendará la comadrona. El refuerzo de los músculos abdominales debe efectuarse después de la reeducación del perineo, en ningún caso antes.

Tres meses después del parto, a no ser que tu médico te indique lo contrario, puedes proseguir ciertas prácticas deportivas, caminar, trotar, nadar, hacer aeróbicos, montar bicicleta, practicar yoga o Pilates.

Gradualmente, podrás ir aumentando el tiempo e intensidad de tus sesiones. No hagas ejercicios demasiado bruscos ni duros hasta que no haya pasado aproximadamente un año tras el parto. Recuerda no forzar mucho el cuerpo, y  parar cuando estés fatigada.

13 comentarios:

  1. Enhorabuena por animarte a crear el blog Olaya! Me parece muy interesante esta entrada. Un beso.
    Lourdes

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  2. Felicidades por Julia, felicidades por este post que tan útil será a muchas madres, y muchos ánimos para que sigas trabajando en el blog, actualizándolo, y ofreciéndonos tus mejores "recetas" para encontrarnos bien y llegar sin dificultades a los cien años.
    Un abrazo.

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  3. Hola Olaya!

    El otro día me surgió una duda, y he pensado que quizás puedas solucionarla en alguna entrada de este blog...
    ¿Qué diferencia hay entre el pescado blanco y el azul? en términos de nutrición... Sé que los boquerones, sardinas, salmón son azul... alguno más?
    Vamos,no es para que me contestes por aquí, pero por si algún día escribes algo de eso.
    Gracias, un saludo,

    María Mi.

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  4. Hola Olaya,
    Yo tengo muchas dudas sobre las 5 comidas al día. Especialmente sobre la 2º. ¿Cuántas horas después del desayuno se recomienda esperar para realizarla? ¿Qué alimentos son los adecuados para esa comida?

    Muchas gracias,

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  5. María,
    La diferencia principal entre el pescado azul y el blanco es su contenido graso. El azul tiene una mayor cantidad de grasa. De todas formas, las grasas presentes en el pescado azul,son beneficiosas para la salud cardiovascular (son los famosos ácidos grasos omega tres). El pescado blanco, es también muy nutritivo y contiene proteínas de fácil digestión. Lo ideal es que nuestra dieta tenga un equilibrio entre ambos. Próximamente profundizaré más en esto, con un post. Gracias por la idea.
    Un saludo.

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  6. Juan,
    Justo voy a hablar de ello en el post de la semana que viene. Lo ideal es repartir las comidas de tal manera que la media mañana sea aproximadamente el 10% de la ingestión calórica diaria. Te recomiendo que sigas la próxima entrada porque en ella hablaré de esto, ofreciendo distintas combinaciones y alternativas que espero que te sean de utilidad.
    Un saludo.

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  7. Como veo que admites peticiones, pues allá va una. Soy consumidor de leche kefirada desde hace años, y me gustaría saber si realmente tiene tantos lactobacilos como se dice, y si la ingesta de un cuarto de litro diario garantiza algún beneficio para el organismo más allá del que proporcionaría tomar cualquier yogur.
    Gracias.

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  8. Javier,

    La diferencia fundamental entre la leche kefirada y el yogur, es el tipo de fermentación y los microoganismos que la realizan (en el caso del kefir además de las bacterias lácticas, también participan levaduras).
    El Kefir realiza una fermentación alcohólica de la leche, por lo que la leche kefirada en principio, contiene pequeñas cantidades de alcohol.
    Ambos son alimentos probióticos (contienen organismos vivos).
    El kefir efectivamente, contiene lactobacilos. Los beneficios para la flora intestinal, son similares en ambos casos (leche kefirada y yogur).
    Como curiosidad, del kefir puede hacerse también un uso tópico en algunos problemas en la piel.
    Por tanto, la leche kefirada es un alimento muy saludable y fácil de digerir, además de una buena fuente de calcio, fósforo y vitaminas del grupo B. Más adelante, tengo la intención de hacer un post sobre los alimentos probióticos en el que hablaré también del kefir.
    Espero haberte ayudado.
    Un saludo

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  9. Olaya, enhorabuena por esta idea, nos ha encantado a toda la familia. Yo también quiero aprovechar para hacerte una pregunta. He tenido un aborto hace unas semanas y me he quedado muy floja. Quería saber sí los consejos sobre la alimentación en el postparto son aplicables a mi caso, o si hay alguna cuestión más que debería tener en cuenta. Muchas gracias por tu ayuda y un besazo para Julia.

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  10. Hola, muchas gracias por tus palabras.
    El primer consejo que te doy (y el más importante) es que busques el asesoramiento el ginecólogo y la matrona. Ellos son los que más saben de esto.
    De todas formas, los consejos que propongo para el postparto corresponden a una alimentación equilibrada. Por lo que serían útiles en tu caso también. Si tú intención es volver a quedarte embarazada, te aconsejo que consumas (además de los complementos que te puede recetar el ginecólogo), alimentos ricos en ácido fólico (fundamentalmente vegetales de hoja verde), yodo (fundamentalmente en alimentos del mar) y calcio (sobre todo en productos lácteos), entre otros. Además, te aconsejo que hagas ejercicio físico y que intentes evitar el alcohol y tabaco (si es tu caso). La idea es preparar a tu cuerpo para el nuevo embarazo, y cuándo se presente, estar en las mejores condiciones de salud posibles. Espero haberte ayudado.
    Un saludo y mucho ánimo.

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  11. Me encanta tu blog y te sigo desde que te encontré,no por casualidad,tuve buenos informantes.Un abrazo

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  12. Me alegro de que te guste, espero que siga siendo así. Un saludo

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